Sin cortarse

Poco a poco va una aprendiendo a darse pequeños lujos.
Los lujos no son cosas que cuestan mucho dinero( eso es lo que quieren que pensemos los capitalistas), sino las cosas que requieren cabezoneria, complicidad, paciencia, buen cálculo, organización,  y... todas esas cosas que tienen muchas personas cuando se lo proponen. 

 YOGUR

En casa haciamos yogur de vez en cuando. Con una yogurtera por supuesto. La pega es que poco a poco los vasos del yogur se fueron rompiendo y no habia manera de encontrar recipientes que encajasen en la yogurtera. Así la yogurtera cada vez trabajaba menos y dormia más en el armario.
No se dónde leí que el mejor yogur era el recien hecho ya que durante esos primeros momentos la bacteria ("el bichito")  que se ha ocupado de hacer todo el trabajo está en su mejor momento y con todas sus cualidades nutricionales a tope.

 Bueno, la cuestión es que aquel artículo que ahora me siento incapaz de explicar me dejó convencidísima: siempre que pudiésemos tomariamos yogur recien hecho.

Título del libro:

 Cómo consumir yogur recien hecho y no morir en el intento

  1. Hacer el yogur en casa dependiendo de los mínimos artefactos posibles.
    • Usas una olla de tu cocina.

    • Escojes un buen juego de vasos y tarros que quepan en la olla ( seguro tienes vasos con tapa o tarros con rosca que luego puedes llevar al trabajo a al cole de los niños)

    • Pones en cada vaso una cucharada de yogurt del que hiciste la semana pasada o de uno que has comprado. El yogur hecho en casa se conserva 2-3 semanas en la nevera y sirve como nuevo inoculador durante 6-8 veces. De vez en cuando tendràs que comprar yogur y usarlo como nuevo inoculador. (Si algun@ de vosotros sabe como hacer que el yogur de casa sirva de inoculador más veces que me lo explique, por favor)
 



 


 
    • Se añade un poco de leche a cada vaso y se remueve bien para que el fermento del yogur queden repartido por todo el líquido.


    •  Se termina de llenar el recipiente con leche y se vuelve a remover bien.
 


    •  Se colocan todos los vasos en la olla.



    • Se llena la olla de agua , o en su defecto hasta que cubra el yogur 

    • Se pone la olla al fuego hasta que el agua esté a unos 45 grados centígrados. Lo podeis saber con vuestro termómetro digital biónico: meteis un dedo en el agua y cuando esté caliente como para daros un baño-sauna, es decir aquella temperatura del agua de la bañera en que entra una con cuidadito porque està bien, bien calentita se apaga


    • Se tapa y se espera entre 6-8 horas y el yogur estará listo. Si lo preparais por la noche tendréis yogur recién hecho para el desayuno.

  • Si os despistais y el agua se calienta más seguramente la levadura se ha muerto, tendreis que volver a inocular con yogur y listos. Si el agua estaba más fría la bacteria no trabaja bien y el yogur queda poco hecho: volveis a calentar y esperais otras 6 horas. (No se tira nada!!!)
  • En verano si teneis buen sol se pone la olla sin agua y tapada al sol y haceis yogur-solar (sin gasto de energia) 


2. Enseñad a los niños a hacer yogur y le explicais toda la historia de los" bichitos" buenos que trabajan para nosotros. No todos los bichitos producen gripes y resfriados..
    3. Al final del año cuentas cuantos envases menos has llevado al contenedor
    4. Mientras se hace el yogur, si puedes, date un tiempo para ti y si tu asqueroso pepito grillo te dice " no estàs haciendo nada" tu le contestas "sí estoy haciendo yogur". 



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